lunes, agosto 21, 2006

Sweet Home Nueva Orleans/ Sweet Home Tungurahua

El día que Nueva Orleans se hundía, Condoleezza Rice viajaba a Manhattan para comprar zapatos.

Spike Lee presentará su documental sobre N. Orleans el 29 de agosto (fecha de la tragedia), y su coro griego será la sobreviviente Phyllis LeBlanc, 42 años, que aceptó participar siempre y cuando los negros no fueran mostrados como ignorantes, pobres y saqueadores...y pudiera usar groserías. Lee dijo que sí, y LeBlanc aceptó. Lo ocurrido en Nueva Orleans no fue un problema racial, sino de clases, dice Lee: los negros ricos de Nueva Orleans no fueron afectados. Mucha gente de Nueva Orleans cree que los diques fueron dinamitados para inundar los barrios más pobres y preservar los mejores (Barrio Francés, Garden District, Audabon Park).

El Tungurahua, el volcán más activo de Ecuador, erupcionó nuevamente la madrugada del jueves 17 de agosto. Todavía se pueden ver los vapores del río Puela, que entro en contacto con los “flujos piroclásticos” aún hirvientes. Si, los ecuatorianos ahora podemos entender a los vulcanólogos del centro de observación geofísica. Lo que todavía no se entiende bien son los 4000 desplazados, los desaparecidos, y el hacinamiento en los refugios y la ausencia de ayuda (la primera donación fue para la primera erupción, el 14 de Julio, y desde ese día no ha llegado nada). Se hablan de pérdidas de $150 millones (ganado y cultivos), pero nadie habla sobre dónde serán ubicados los refugiados.

La destrucción de Nueva Orleans estaba anunciada. Ningún desastre se anticipó con tal nivel de precisión, pero no se tomaron medidas.

La peligrosa actividad del volcán Tungurahua ha sido anunciada desde 1999. Sin embargo, cuando muchas familias fueron evacuadas en el 2002, al regresar a sus casas estas habían sido saqueadas y sus animales robados. El ejército, que cuidaba la zona, juró no haber visto nada.

Fueron esas familias las que no quisieron salir de sus casas.

¿Dios hace limpieza étnica?...

Un líder republicano de Luisiana, el 9 de septiembre del 2005, dijo: “Lo que nosotros no pudimos hacer, lo hizo Dios. La ciudad se libró de las drogas y de la violencia.

En la zona de desastre del Tungurahua se construirá un parque nacional.



fernando mejia toro