miércoles, septiembre 29, 2010

de vuelta del camino


Si algo se descubre con los años es que el universo entero, el conocido al menos, pasa por un mismo punto en algún momento, un vórtice donde cabe todo, desde el amor de juventud, las traiciones, las cosas que uno dice mientras hace el amor, y las que no;  irremediablemente tiene que pasar también la extinción, el fin de algo personal, y ese mar de nada donde nadan todas las barcas asesinas de Bolaño, todos los cuerpos que te contagiaron de su frío, y ese horizonte que a veces se marcha inesperadamente, y la inclemencia de la que fuiste capaz, y que ejecutaste exultante.

He vuelto del Camino de Santigo y nada ha cambiado, salvo que en el trayecto cumplí mi quinto año aquí en Madrid. Esta loca impaciente ciudad. Esta princesa que te infunde valor. 

feliz aniversario, puta ciudad, mi vórtice.