domingo, octubre 26, 2008

veintidiez

Domingo. Descargo un disco de charlie desde el blog de Jorge. Canción para mi muerte es la primera. Leo el blog de xavier, ha cumplido veinteionce, buena forma de camuflar la edad. Ya tendré que maquillarme igual, llegado su momento. Paso al blog de juan andrade, leo su post sobre la muerte de newman. Murió tranquilo, rodeado de su familia, y en casa. Así lo hubiera querido mi abuela, pero los médicos prefirieron hacerlo en un hospital privado, conectada a cien tubos blancos. La cuide muchas noches, pienso ahora, esperando el momento que despertara para decirle que me iba a estudiar a madrid.

Mi café se enfría mientras escribo estas primeras horas de domingo.

¿Alguien sabe el segundo nombre de Fidel? Alejandro. Fidel Alejandro. Fidel es hijo de Ángel Castro y la ama de llaves de éste. Don Ángel se casó con ella cuando su esposa lo abandono, seguramente por que la maltrataba. Fidel es hijo de la ama de llaves de su padre. Quizás nunca pudo superarlo, por eso hizo la revolución.

La habitación está llena de esas primeras horas del día. No hay como explicarlo.

Termino el café. Miro mi cámara. Hace frío, pero igual saldré. Debo darme prisa, pronto seré veintidiez.


Invitame a ver tu historia,
nunca diré que ya la sé.

Escondeme en tu memoria,
quiero vivir, quiero vivir.

Y describime los lugares donde has ido,
quiero viajar, quiero seguir.
Y recordame hasta dónde has llegado,
quiero saber dónde morir.



2 comentarios:

Tati Bertolucci dijo...

la canción es preciosa... invitame a ver tu historia, nunca diré que ya la sé... te lo prometo.
si puedes llevate contigo las horas de mis domingos...

Anónimo dijo...

Efectivamente, bella canción y sincera reflexión dominical.

Te sigo.